Investigaciones anteriores han hallado niveles séricos más bajos de dehidroepiandrosterona (DHEA) o de su forma sulfatada, la DHEA-S, en mujeres diagnosticadas de trastorno del deseo sexual hipoactivo (TDSH). Dado que la DHEA y la DHEA-S tienen múltiples acciones directas en el cerebro, así como propiedades antiglucocorticoides, es posible que unos niveles más bajos de DHEA repercutan directamente en el funcionamiento sexual de las mujeres.
Hasta la fecha, la importancia de los niveles más bajos de DHEA sigue sin estar clara. Hasta donde sabemos, no se ha realizado ningún estudio empírico de las hormonas del estrés como marcadores de la desregulación HPA en mujeres con HSDD. Para llenar este vacío, el presente estudio utilizó varias medidas de la función del eje HPA – cortisol y DHEA matutinos y vespertinos, la respuesta del cortisol al despertar (CAR), la pendiente diurna del cortisol y la relación cortisol:DHEA – y examinó su relación con el funcionamiento sexual en N = 275 mujeres con (n = 137) y sin (n = 138) TDSH.
Los resultados demostraron múltiples marcadores hormonales de desregulación HPA en las mujeres diagnosticadas con TDSH en comparación con las participantes de control, en concreto, niveles más bajos de cortisol AM y DHEA AM, una pendiente diurna de cortisol más plana y un CAR más bajo.
En general, los resultados del presente estudio indican que el bajo deseo sexual persistente en las mujeres está asociado con la desregulación del eje HPA, con alteraciones tanto del cortisol como de la DHEA potencialmente perjudiciales para el deseo sexual.